Pulau Semakau es una isla al sur de Singapur que fue identificada en 1997 como una de las islas occidentales en el Plan Conceptual de la Autoridad de Reurbanización Urbana (URA). Ubicada aproximadamente a 8 km al sur de Singapur.
Pulau Semakau, se fusionó con Pulau Seking en la década de 1990 para formar el primer relleno sanitario en alta mar de Singapur, que comenzó a operar en abril de 1999.
Su historia
Pulau Semakau indica que el nombre «Semakau» probablemente proviene de la palabra malaya «bakau», que significa «árboles de mangle». La isla estaba habitada desde al menos 1844, aunque se cree que antes de dicha fecha ya estaba ocupada basado en algunos estudios arqueológicos. En 1957, la isla albergaba una comunidad malaya y china, un aproximado 322 habitantes, principalmente pescadores.
En la década de 1960, la población de la isla fue impulsada por los isleños reubicados desde las cercanías de Pulau Bukom para dar paso a una refinería de petróleo.
Estos habitantes de Pulau Semakau, junto con otras islas cercanas, solían organizar un encuentro deportivo anual conocido como Pesta Five S, que incluía diferentes juegos y actividades.
La vida en Pulau Semakau terminó cuando la mayoría de los isleños se mudaron al continente en 1977. El pueblo pronto fue tragado por el bosque circundante.
En 1975, se aprobó la propuesta de recuperación de Pulau Semakau para convertir la isla en un complejo petroquímico. Sin embargo, esta idea evolucionó hacia la creación de un vertedero de basura en alta mar debido a las limitaciones de espacio en la isla principal.
La construcción del relleno sanitario de Semakau comenzó en 1995 y se inauguró oficialmente en abril de 1999. El proyecto incluyó medidas para proteger el entorno marino y los arrecifes de coral, y la isla se ha convertido en una reserva natural con una biodiversidad notable.
En 2011 se inició el desarrollo de la fase II del relleno sanitario. Para maximizar la capacidad y reducir los costos, las múltiples celdas de vertedero diseñadas en la fase I fueron reemplazadas por una sola celda grande. La finalización de la fase II en 2015 proporcionó 16,7 millones de metros cúbicos adicionales de capacidad de relleno sanitario para satisfacer las necesidades de eliminación de desechos de Singapur hasta por lo menos el año 2035.
La protección del ecosistema natural fue una preocupación durante el desarrollo del vertedero. Se tomaron medidas para evitar la contaminación del mar.
La construcción del vertedero de Semakau incluyó medidas para garantizar que las cenizas y los desechos no incinerables no contaminaran el mar circundante. Un dique rocoso de 7 km de perímetro encierra parte del mar frente a Pulau Semakau y Pulau Sakeng para así crear el espacio del vertedero. El dique está revestido con una capa impermeable de arcilla marina, lo que garantiza que los lixiviados de los residuos queden contenidos en el vertedero (líquido que drena de un vertedero) evitando que se filtren al mar circundante. Las diversas medidas adoptadas para proteger el medio ambiente marino dieron como resultado que los lechos de pastos marinos, los manglares y los arrecifes de coral a lo largo de las costas occidentales de Semakau permanecieran prácticamente intactos
Hoy en día, el ecosistema marino alrededor del relleno sanitario está prosperando con una vida marina rica.
Además de su función como vertedero, Pulau Semakau también se ha convertido en un lugar para actividades educativas y recreativas. Grupos de interés como el Museo Raffles de Investigación sobre Biodiversidad, Nature Society (Singapur) y la Sociedad de Astronomía de Singapur han participado en actividades recreativas en la isla desde 2005.
El proceso de vertido en el vertedero de Semakau
La estación de transferencia marina de Tuas (TMTS) es un punto intermedio de recolección de cenizas de las plantas de conversión de desechos en energía y desechos no incinerables antes de que se transporten al vertedero de Semakau. Construido al mismo tiempo que el relleno sanitario de Semakau, está ubicado junto a la planta de incineración de Tuas Sur.
Todos los vehículos de recolección autorizados que ingresan y transportan desechos no incinerables se pesan primero en los puentes de pesaje antes de ingresar al edificio de transferencia. También se pesan los vehículos que transportan cenizas incineradas a TMTS.

La sala de recepción está diseñada para un tiempo de respuesta rápido con 20 bahías de descarga colgantes para que los vehículos descarguen los desechos directamente en las barcazas. La plataforma basculante está diseñada para sobresalir en la barcaza de modo que los desechos se vuelquen en el centro de la barcaza. Las excavadoras se utilizan para esparcir los desechos en la barcaza para garantizar que se cargue de manera óptima.

Los vehículos vacíos que llevaron residuos no incinerables a la TMTS son nuevamente pesados. Esto permite determinar el peso de los residuos entregados. Al final del día, las tapas de las escotillas de las barcazas totalmente cargadas se cierran para proteger la carga del viento y el agua durante el viaje por mar de 33,3 km hasta Semakau.

Al llegar al relleno sanitario de Semakau, la barcaza atraca en el edificio de transferencia adjunto. Luego, el remolcador se desconecta y regresa a TMTS con una barcaza vacía.

Grandes excavadoras con cucharas intercambiables y especialmente diseñadas descargan los residuos sólidos de la barcaza. Luego, los desechos sólidos se colocan en un vertedero todoterreno de carga útil de 35 toneladas.

Un camino pavimentado de 10 m de ancho a lo largo de la parte superior del terraplén perimetral proporciona acceso a todas las secciones del vertedero. Los camiones de volteo viajan a un sitio de descarga designado y descargan las cenizas incineradas y los desechos no incinerables en la celda del vertedero. A continuación, excavadoras y compactadoras nivelan y compactan las cenizas incineradas y los desechos no incinerables.

Cada celda se cubre con una capa de tierra una vez que se ha llenado hasta el nivel del suelo. Posteriormente, la hierba y los árboles echan raíces para formar un paisaje verde. Se activa una nueva celda de volteo sellando las tuberías de hormigón que conectan la celda con el mar. Se crea un espacio vacío en el que se verterán los residuos sólidos.
El objetivo clave de este documental referente a Pulau Semakau, es presentar la transformación de la isla en el primer relleno sanitario en alta mar de Singapur. Este escrito cuenta la historia de una isla habitada por comunidades malayas y chinas, hasta su conversión en un vertedero para la gestión de desechos no incinerables.
El mismo resalta la importancia de proteger el entorno natural y la biodiversidad circundante durante este proceso de desarrollo, mostrando cómo se han tomado medidas para preservar los manglares, los arrecifes de coral y la vida marina y más que nada busca sensibilizar al público sobre la necesidad de gestionar los residuos de manera sostenible demostrando de manera significativa, cómo la isla de Pulau Semakau se ha convertido en una atracción educativa y recreativa para diversos grupos de interés.